Asteroide

Hoy se nos acerca a saludar una "piedrecita" de 45 metros de diámetro llamada 2012DA14 procedente del lejano espacio, con el consiguiente revuelo de la concurrencia.  Hecho que me trae recuerdos de Axterix y su cuadrilla de irreductibles galos, siempre temiendo que el cielo se desmorone sobre sus cabezas... Por mi parte, estoy tranquilo: no creo que la gran sabiduría divina nos tenga destinado un chichón en la cabeza como castigo a nuestra pobreza espiritual, (de la otra se están encargando ya demasiados). Prefiero creer que somos los responsables de todo lo que nos ocurre, juez y parte, víctima y victimario,  luz y oscuridad, colaborando a nivel de raza humana en el devenir del planeta. Como ya he dicho aquí más veces lo que se nos está pidiendo es,  más allá de nuestra realidad personal, comprender que como grupo estamos obligados  a trabajar en pro de una elevación masiva de conciencia que catapulte por fin esta realidad hacia otro paradigma al que estamos destinados.