Fase 1: Pide perdón a tu hermano porque le has utilizado para que desempeñara un papel (a veces un "papelón") en tu camino de sanación. Fase 2: Perdónate a ti mismo por ponerte en la tesitura de experimentar sufrimiento. Fase 3: Ni él ni tú necesitáis el perdón porque todos ¡somos inocentes!.
No hay comentarios:
Publicar un comentario